Hay un término denominado simbiosis que hace referencia a la relación estrecha y persistente entre organismos de distintas especies. A los organismos involucrados en este proceso se les denomina simbiontes (http://es.wikipedia.org/wiki/Simbiosis).
A todos y cada uno de los seres humanos que pueblan el mundo podría denominárseles de esta manera. No porque ocupen el mismo cuerpo que otro organismo sino porque están todos influenciados los unos con los otros en una cadena ilimitada. Aunque se podrían decir multitud de similitudes entre los millones de personas de la Tierra tan sólo nos interesa la influencia y el impacto existentes entre el mundo adulto y el infantil que están conectados el uno con el otro irremediablemente.
Los niños avanzan hacia el estado de madurez física a la vez que son influenciados por la educación adulta. Este proceso terminará con ellos convertidos en “personas mayores” aptas para unirse a la basta marea de vidas “experimentadas” del planeta. Este crecimiento es un proceso biológico, sin pausa ni regresión, por el que muchos no quieren pasar a pesar de no tener opción. Así las pequeñas personas dejarán su época dorada poco a poco para llegar a su nueva etapa vital. Durante todo este proceso el mundo infantil se verá influenciado constantemente por el adulto.
A su vez, las personas adultas que ya han alcanzado esa “madurez” se verán influenciados por el mundo infantil (en mayor o menos medida) intentando, en muchos casos, regresar a esa etapa anterior.
Esa influencia entre los dos mundos forma el entramado de nuestra sociedad en la que el uno y el otro viven en un continuo choque, dando y tomando lo que necesiten entre ellos en una simbiosis un tanto caótica.
Estas dos imágenes reflejan la influencia del mundo adulto en el infantil y viceversa.
1. En la primera fotografía el niño vestido de conejo lleva en sus manos un cartel que dice I’m a Rabbit en un intento de resaltar su vestimenta. Puedo imaginarme al autor de la instantánea yendo hacia el pequeño, darle el cartel mientras le dice que se esté quieto y mantenga el cartón en alto a la vez que le da unas palmaditas en la cabeza. Influenciado por esa orden, el crío abandonará la usual inquietud de cualquier niño para adoptar la supuesta solemnidad de los adultos haciendo resaltar con ese absurdo cartel algo que en la fotografía es más que evidente.
2. En la segunda fotografía puede verse a un hombre adulto, sin lugar a dudas, vestido con un traje de conejo. Tal vez por separado, la imagen produzca en el espectador una sensación de duda de por qué el hombre viste así, o de risa ante su “estilo variopinto”. Sin embargo en conjunto con la imagen citada anteriormente podría formularse la pregunta de ¿por qué un hombre adulto como él va vestido como se vestiría un niño pequeño en Carnaval? Esta pregunta podría llevar al espectador a pensar que tal vez ese hombre que físicamente ha alcanzado esa madurez citada antes, no haya abandonado del todo esa influencia de la etapa anterior. Esto podría haberlo llevado a un estado intermedio, a alguien atrapado en un cuerpo que es suyo y no lo siente así y que a la vez tiene una mente libre de la fría y seria lógica de los adultos pero que en consecuencia ha terminado perdido en un estado intermedio que le conducirá poco a poco a la locura por el hecho de querer y no poder ser de nuevo ese niño que guarda en su interior.
Esta influencia del mundo infantil en el adulto y viceversa junto con las dos imágenes mostradas antes fueron lo que me empujaron a desarrollar w.y.Alice?. El pensar lo influenciados que están algunos adultos por el mundo de los niños, niños encerrados en cuerpos desconocidos que han entrado en un mundo caótico, absurdo, demasiado serio para su imaginativa cabeza. Esto junto con el nombre de Alicia me hicieron pensar en el creador del País de las Maravillas, un mundo donde predomina lo absurdo, lo sin sentido, lo caótico y emocionante del vivir sin reglas. Así comencé una investigación sobre Charles Dogson, más conocido como Lewis Carroll, y su intento desesperado por escapar de un mundo adulto que odiaba y no le comprendía.
Esta influencia del mundo infantil en el adulto y viceversa junto con las dos imágenes mostradas antes fueron lo que me empujaron a desarrollar w.y.Alice?. El pensar lo influenciados que están algunos adultos por el mundo de los niños, niños encerrados en cuerpos desconocidos que han entrado en un mundo caótico, absurdo, demasiado serio para su imaginativa cabeza. Esto junto con el nombre de Alicia me hicieron pensar en el creador del País de las Maravillas, un mundo donde predomina lo absurdo, lo sin sentido, lo caótico y emocionante del vivir sin reglas. Así comencé una investigación sobre Charles Dogson, más conocido como Lewis Carroll, y su intento desesperado por escapar de un mundo adulto que odiaba y no le comprendía.
[Charles Dogson/ Lewis Carroll. Fotografía realizada por él mismo. 1964]
No hay comentarios:
Publicar un comentario